La población
Es muy difícil saber cuál era la población aborigen antes de la llegada de los europeos. Algunos cronistas hablan de “tierra muy poblada” o de “tierra que hervía de gente” y no daban datos sobre el número de habitantes. Los censos realizados a finales del siglo XVI fueron hechos por los mismos conquistadores y por misioneros y sólo tenían en cuenta la población adulta (indios tributarios) y no hacen claridad sobre niños, mujeres y ancianos. Además, estos censos fueron hechos después del choque inicial entre las dos culturas.
Fray Gerónimo de Escobar escribió que la provincia de Anserma tenía más de 40.000 indios y Fray Pedro Simón decía que estaba “llena de ciudades”. Sobre la provincia de Cartago anotó Jorge Robledo que “la población tenía 16 leguas de ancho y largo, en donde no hay palmo que esté por poblar”. El mismo Fray Gerónimo de Escobar anotó que en esta provincia de Quimbaya “hubo más de 20.000 indios”. Cieza de León escribió sobre la provincia de Arma que “es muy grande y muy poblada, tiene más de 20.000 indios de guerra, sin las mujeres y niños”.
Sobre la provincia de Paucura dice Cieza que “tenía cinco o seis mil indios”, y acerca de Picara agrega que “había más de diez o doce mil indios de guerra”. En cuanto a Pozo afirmó Pedro Sarmiento que había “más de cuatro mil indios de guerra”. Sobre la ubicación de las poblaciones indígenas se puede afirmar que las crestas de las montañas, las quebradas y ríos formaban límites naturales entre los cacicazgos. En cada loma y en cada valle gobernaba un cacique, independiente de su vecino pero unidos por lazos culturales y familiares, por esta razón se confederaban en caso de guerra.