Con la presencia de las autoridades de rentas de los departamentos de Caldas, Risaralda y Quindío, se realizó un conversatorio sobre las consecuencias de la expedición de la ley 1686 del 19 de diciembre de 2016, ley de monopolio, así como la planeación de las tareas que los departamentos deben realizar para el acatamiento de la norma e incorporar en sus legislaciones territoriales los cambios legislativos.
La expedición de la norma fija el régimen propio del monopolio rentístico de licores destilados y modifica el impuesto al consumo de licores, vinos aperitivos y similares. Al respecto la jefe de la Unidad de Rentas del departamento, Liceth Izasa Vallejo, señaló: “Esta ley obliga a los departamentos a variar el tratamiento legal que las entidades territoriales han venido ejerciendo sobre la producción e introducción en sus jurisdicciones de bebidas alcohólicas, habida cuenta que la renta departamental que proviene de dichas actividades es el ingreso más importante de los departamentos y sobre los cuales se financia la salud, la educación y el deporte, por eso el departamento de Caldas, modelo en la lucha anti contrabando, participa y lidera estos espacios”.
Durante el encuentro, se detectó la necesidad de crear bloques regionales entre los departamentos para asumir estrategias conjuntas en defensa de dichas rentas y la atención al fenómeno del contrabando. “Se acordó la necesidad del desarrollo, a través de ordenanzas y decretos, para poder estar a tono con la nueva ley, para conocer el fondo de muchas de las nuevas figura que deben tener aplicación territorial, tales como el monopolio sobre alcohol potable para la fabricación de bebidas alcohólicas, los derechos de explotación y la participación, la nueva destinación de recursos, y la nueva estructura tarifaria” Afirmó la funcionaria.